Cuando nos planteamos la correción de nuestra dentadura, en ocasiones puede resultar abrumador el número de opciones que se nos presentan. Uno de los aspectos más importantes es la elección del tipo de brackets que utilizaremos. Existen diferentes tipos que se adaptan a las necesidades y preferencias de cada paciente. En este artículo, te presentamos los diferentes tipos de brackets que existen, cómo funcionan y cuál podría ser el más adecuado para ti.
Los brackets metálicos son los más comunes en la ortodoncia. Están fabricados en metal y son muy resistentes y duraderos. A pesar de no ser estéticamente atractivos, sí son muy efectivos en la corrección de cualquier tipo de maloclusión dental. Además, su precio es más asequible respecto a otros tipos de brackets.
Los brackets cerámicos están fabricados en un material translúcido que se asemeja al color del diente. Aunque no son tan resistentes como los metálicos, son mucho más estéticos y permiten una sonrisa más natural durante el tratamiento. Este tipo de brackets son recomendados para pacientes que tienen una coloración de dientes más clara, ya que en dientes más oscuros pueden llegar a mancharse y perder su color.
Los brackets linguales se colocan en la parte posterior de los dientes, lo que los hace prácticamente invisibles. Son una opción muy estética para aquellos pacientes que no desean que se les vean los brackets. Sin embargo, no todos los pacientes son candidatos a utilizar este tipo de brackets, ya que pueden interferir en la mordida y en el habla al principio del tratamiento. Además, su colocación es más compleja y requiere de un especialista en ortodoncia lingual.
Los brackets autoligables son una alternativa a los brackets tradicionales que utilizan ligaduras para fijar el arco al bracket. En su lugar, los brackets autoligables cuentan con una pequeña compuerta que sujeta el arco, lo que reduce la fricción y la necesidad de ajustes. Además, este tipo de brackets permiten un mayor movimiento dental y son más fáciles de limpiar.
En conclusión, la elección del tipo de brackets adecuado dependerá de cada paciente y sus necesidades específicas. Es importante consultar con un especialista en ortodoncia para determinar cuál es el tratamiento ideal para cada caso en particular.